
Cómo germinar semillas de jitomate y plantación:
http://www.youtube.com/watch?v=MVGEWRQSEv0
Cultivo de tomate en terraza:
Cómo plantar tomates en casa
Tener un huerto en casa es fácil, promueve el contacto con la naturaleza y el desarrollo del ingenio. Uno de los cultivos más comunes es el del tomate.
El tomate tiene pocas calorías y aporta hidratos de carbono, vitaminas, minerales y caroneoides es, por lo tanto, un alimento saludable y rico, perfecto para tu pequeño huerto.
Aquí van algunos trucos y consejos para su correcta plantación.
El tomate es un elemento fundamental en nuestras dietas: sano, nutritivo y digestivo. Para disfrutar del autoconsumo, con nuestro propio huerto en casa, debemos seguir algunos pasos:
– En un suelo de calidad, fértil y enriquecido con materia orgánica, hacemos la siembra con las semillas a 5 mm de profundidad, manteniendo una separación de 4 cm entre ellas (Maceta de 30 cm de diámetro y al menos 30 cm de profundidad)
– Es importante contar con temperaturas cálidas y necesita mucho sol, si no la planta se muere.
– A la hora de regar la tomatera hay que tener en cuenta que si están en maceta necesitan más riego. Al trasplantar la hortaliza a su maceta definitiva haremos un riego profundo. Más adelante, cuando florece, se riega más a menudo manteniendo húmedo el sustrato pero sin excedernos.
– ¡Recordad! Es por naturaleza una planta trepadora, debe ser estacada desde el principio para controlar su crecimiento y que nos de frutos.
– El último paso es disfrutar de tus tomates. En unos 150 días podrás iniciar la recolección.
Hay que tener cuidado con las tomateras, ya que tienen algunas limitaciones. La araña roja, la mosca blanca y los pulgones son algunos de sus enemigos. A su vez, las bajas temperaturas pueden acabar con nuestro huerto de tomates, si quieres cultivar estas hortalizas todo el año, no dudes en fabricarte tu propio invernadero en casa.
Fuente: Facilisimo
Cómo cultivar tomates
Plántalos en casa
No sólo es una hortaliza muy saludable repleta de vitaminas y minerales, sino que además, su cultivo es muy sencillo y cómodo. Por eso, si estáis pensando en cultivar el tomate en casa, tomad nota de los siguientes pasos.
¿Qué necesitamos?
Semillas: Lo primero que tenemos que hacer es conseguir las semillas del tomate. En casa, seleccionamos los tomates más maduros, los partimos por la mitad y sacamos el jugo con las semillas a un vaso. Lo mantendremos tres días para que fermente y poder proceder a su lavado. Los tres días posteriores serán para su secado. Si no queréis obtenerlos vosotros mismos, recordad que también podéis comprarlas.
Tierra. La podemos mezclar con moho, estiércol o fertilizantes ó directamente, comprar sacos de tierra que portan sustratos especiales.
Maceta: necesitamos un recipiente como una maceta, contenedor o bandeja. Es aconsejable que sea de unos 50 cm de profundidad y de diámetro y con agujeros en la base. Es recomendable que la maceta para cultivar sea de plástico.
¿Cuándo y dónde cultivarlo?
Dependiendo de la cuidad en la que nos encontremos, los meses para la siembra variarán. En España, finales de febrero y principios de marzo es la época idónea para iniciar la siembra.
Si vivís en ciudades muy frías, esperad un poco más. Pero, si por el contrario vuestra cuidad es de clima cálido y falta poco para la primavera, adelante. Ya es el momento para sembrar y poder realizar después, su trasplante.
El tomate se puede cultivar desde febrero hasta junio, así que ya podemos empezar a preparar el contenedor. No podemos olvidar que hay que plantar las semillas unos dos meses antes de trasplantarla, que se hará con temperaturas más elevadas.
El tomate puede ser cultivado en muchos tipos de tierra, pero será mejor que sea tierra fértil y seca. El pH recomendado gira en torno a 6. Asimismo, podemos mejorarla con materiales orgánicos como el estiércol. Si la tierra es arenosa podemos utilizar también fertilizantes.
La ubicación será esencial para su crecimiento por lo que debemos asegurarnos de que el lugar es cálido y le da la luz.
¿Cómo cultivarlo?
Lo primero es preparar la maceta. En esta tenemos que echar la tierra con un sustrato de calidad hasta la mitad. Añadimos un poco de agua y esparcimos las semillas separadas entre sí. Después, rellenamos la maceta con la tierra restante que puede mezclarse con fertilizantes.
Las semillas tendrán que estar a 1cm aproximadamente de profundidad y podéis cubrir la jardinera con un plástico, pero siempre manteniendo la ventilación y sin tocar el sustrato.
Para que crezcan con fuerza, la expondremos al sol directo por lo menos medio día (mínimo 6 horas) y controlaremos su riego.
Cuando nuestra planta llegue a los 15 cm de altura aproximadamente y deje ver sus primeras hojas, significa que es el momento de trasplantarla a su lugar definitivo.
Cuidados
Los cuidados de esta planta son mínimos. Solo bastará con saber que requiere una gran cantidad de agua y un clima cálido.
– Necesita un clima caliente. Su temperatura ideal es de 20 °C, aunque con 15 °C ya puede crecer.
– El riego es fundamental. Necesita mucha agua, así que lo haremos una vez al día.
– Al sustrato lo podemos enriquecer con compost.
– Un buen drenaje es esencial porque no podemos permitir que se encharque. La maceta debe tener un buen desagüe.
Fuente: PlantasFacilisimo