
Una planta carnívora, también llamada planta insectívora, es una planta que obtiene parte o la mayoría de sus necesidades nutricionales (pero no de energía) mediante la captura y el consumo de animales y protozoos, normalmente insectos (además de otros artrópodos). Estas plantas crecen generalmente en lugares donde el suelo es pobre, en especial en nitrógeno, como las tierras ácidas pantanosas y los farallones rocosos. Charles Darwin escribió el primer tratado conocido sobre estas plantas en 1875.

Se piensa que el hábito carnívoro ha evolucionado en, al menos, 10 linajes separados que se encuentran representados por más de una docena de géneros en cinco familias. Éstas incluyen alrededor de 630 especies que atraen y atrapan a sus presas, producen enzimas o bacterias digestivas y absorben los nutrientes resultantes. Además, más de 300 especies de plantas protocarnívoras en varios géneros muestran algunas, aunque no todas, de estas características.

Existen distintos tipos de plantas carnívoras, dependiendo del mecanismo de captura utilizado.
Pinzas

La presa dentro se mueve, y estimula la secreción de jugos digestivos para su desintegración, que dura varios días. Una vez digerido el insecto, la hoja se desprende de su tallo original para dar lugar a una nueva hoja y poder repetir este proceso una y otra vez.
Pelos pegajosos
Pinguicula gigantea: las hojas están cubiertas de mucosidad que producen las glándulas que sirven a la planta para la captura de pequeños insectos.
Cuando un insecto se posa en la hoja, queda atrapado en los pelos pegajosos. Después los tentáculos de Drosera se curvan hacia adentro hasta que se cierran. Puede tardar desde un minuto a varias horas en cerrar y transcurren entre 7 a 14 días hasta que los tentáculos se vuelven a abrir completamente.
Trampas de caída

Darlingtonia californica es única porque no atrapa el agua de lluvia en su jarra, sino que la regula dentro bombeando desde sus raíces o expulsándola, según convenga. Sus hojas no producen enzimas digestivas, ya que las células que absorben los alimentos son idénticas a las raíces del suelo, confiando en bacterias simbióticas. También comparte su mecanismo de captura con Sarracenia psittacina, el la que el insecto atraído por un néctar que produce la entrada de la trampa es confundido por «falsas salidas» o «falsas ventanas», que sólo harán que el animal vaya más abajo hasta que quede agotado y caiga en el líquido.
Trampas mecánicas

Trampas de langosta-olla

Este mecanismo recuerda mucho al visto en Sarracenia psittacina, Darlingtonia californica y Nepenthes aristolochioides.
Combinación de trampas
Un mecanismo utilizado únicamente por Drosera glanduligera, en la que combina características de las trampas de pinza y de sus trampas de pelos pegajosos, estas últimas comunes en las demás droseras.
Cultivo

Las plantas cultivadas en el exterior normalmente obtienen insectos más que suficientes para alimentarse adecuadamente, aunque en ocasiones se les deben suministrar manualmente para suplementar la dieta. Sin embargo, estas plantas son incapaces de digerir otro tipo de alimentos que no sean insectos, como trozos de carne, por ejemplo, ya que estos se pudrirían en el interior de la trampa causando la muerte de toda la planta. Es raro que una carnívora muera aunque no atrape ningún insecto, lo que puede afectar es a su crecimiento. En general, lo mejor es dejar que estas plantas utilicen sus propios recursos: las causas más comunes de muerte para una Venus atrapamoscas, son, además de regarla con agua del grifo, intentar forzar su trampa para alimentarla.
Salvo un par de especies, Nepenthes y Pinguicula, que vegetan bien a la sombra, la mayoría requiere luz brillante o pleno sol, para estimularles a sintetizar los pigmentos rojo y púrpura de la antocianina.
La mayoría vive en los pantanos y las demás, generalmente, en regiones tropicales, por lo que requieren un alto grado de humedad. Estas condiciones se pueden imitar en el cultivo doméstico o a pequeña escala colocando las plantas dentro de un recipiente mayor con el fondo cubierto de guijarros que se mantengan constantemente húmedos. Las especies pequeñas de Nepenthes vegetan bien en un terrario.
Muchas especies son originarias de regiones frías, por lo que pueden cultivarse en un jardín húmedo durante todo el año. La mayoría de las especies de Sarracenia tolera temperaturas por debajo de 0 °C, a pesar de que casi todas son oriundas de la zona suroriental de Estados Unidos. Las especies de Drosera y Pinguicula también toleran estas temperaturas. Sin embargo, el género Nepenthes, que es tropical, requiere entre 20 a 30 °C para prosperar.
El sustrato más adecuado para las carnívoras es una mezcla 3:1 de turba de Sphagnum con arena ácida del tipo usado para horticultura (la fibra de coco es un sustituto más ecológico que la turba). Nepenthes crece bien en un compuesto para orquídeas o simplemente en musgo de Sphagnum.
Irónicamente, estas plantas son propensas a sufrir infestaciones parasitarias de áfidos o cochinillas. Los ataques menores se pueden eliminar a mano, sin embargo las infestaciones masivas requieren un insecticida. El alcohol isopropílico es efectivo como insecticida tropical, particularmente para cocoideos. El Diazinón es un excelente insecticida sistémico tolerado por la mayoría de las carnívoras, así como el Malathion y el Acephate.
Pero aunque las plagas de insectos puedan ser un problema, el mayor asesino de carnívoras (además del maltrato humano) es el moho gris (Botrytis cinerea). Éste medra en condiciones cálidas y húmedas, convirtiéndose en una seria amenaza en invierno. En cierta medida, se puede proteger a las carnívoras de regiones frías, manteniéndolas frescas y bien ventiladas y asegurándose de retirar las hojas muertas con regularidad. Si aun así el hongo ataca, será necesario un fungicida.
Fuente: Wikipedia